Admitió su culpa y fue sentenciado. Este sábado, Dennis Plata Tancara, de 34 años, fue condenado a 30 años de cárcel tras haber confesado que mató a su madre y su sobrina de 15 años. Ambas víctimas fueron halladas sin vida en su domicilio de El Alto y el sindicado en inicio trató de hacer creer que les habían robado.
“La Fiscalía presentó las evidencias colectadas en el lugar de los hechos; como acta del levantamiento de los cadáveres, acta de indicios materiales, biológicos y genéticos, acta de autopsia médico legal; además el sujeto aceptó ser autor de la muerte de sus familiares y reveló detalles del ilícito que cometió, por ello el juez le dio la máxima sentencia”, confirmó el fiscal departamental de La Paz, William Alave.
De acuerdo con las investigaciones, el 26 de julio en la noche, Plata fue a visitar a su madre a su vivienda de la ciudad de El Alto, y una discusión se desató entre ambos. El hombre golpeó a la víctima, su progenitora, de 58 años y le quitó la vida; luego, arremetió contra su sobrina de 15 años, quien trataba de ayudar a su abuela.
“Para no ser descubierto, el sentenciado cambió la escena del hecho para hacer creer que hubo un robo en el domicilio, lavó una frazada que estaba con sangre de su mamá, limpio la vivienda y sacó los cuerpos al patio, después llamó a la Policía y manifestó que encontró a sus familiares sin signos vitales y que habrían ingresado a robar; sin embargo se encontró los objetos que faltaban (garrafas y un televisor) del domicilio, en un alojamiento de la zona Villa Adela de El Alto, donde él llevó para esconderlos”, informó la Fiscalía, mediante una nota institucional.
Pese a sus intentos por desviar las investigaciones, los indicios fueron claros y, tras ser indagado, confesó el crimen. Por esto, fue sometido a un juicio por procedimiento abreviado que este sábado terminó con la sentencia de pena máxima por los delitos de parricidio y asesinato.