La ministra de Salud y Deportes, María Renée Castro, afirmó que los nueve departamentos del país cuentan con disponibilidad de vacunas contra la COVID-19, después de la llegada de más 600.000 dosis mediante el mecanismo Covax; también se garantizan las pruebas PCR para el diagnóstico oportuno.
“La recomendación es para toda la población: que vayamos por nuestra dosis de refuerzo anual que ya nos tocaría este 2024. Hemos obtenido un lote de vacunas, a través del mecanismo Covax, pediátricas y para adultos, que han sido distribuidas durante toda la semana mediante la red del sistema de salud para llegar a todos los municipios”, informó Castro en una entrevista televisiva.
La ministra instó a la población a mantener las medidas de protección contra la COVID-19, ya que el SARS-CoV-2 es un virus que seguirá circulando en el país con una dinámica de incremento de contagios de noviembre a febrero para luego disminuir; y volver a otro brote en la época fría del año, coincidiendo con la circulación de otros virus respiratorios.
“Es un proceso normal, no nos tenemos que alarmar, pero sí ocuparnos de protegernos”, reflexionó.
En la última semana epidemiológica N°50 se registró un incremento de casos del 61%, de 303 a 487 casos, con foco en el departamento de Cochabamba. Ante esta situación, Castro recomendó prevenir complicaciones graves mediante la vacunación.
La vacuna pediátrica se aplica a niñas y niños de 5 a 11 años de edad. Para los inmunodeprimidos (grupo prioritario para la vacunación), les corresponde tres dosis: la primera al contacto, al acercarse a un centro de salud; la segunda, a las 3 semanas después de la primera dosis (21 días); y la tercera, a los 6 meses después de la 2da dosis. Para los niños sanos que nunca fueron vacunado, se aplica una dosis única.
La vacuna para adultos se aplica a personas mayores de 12 años, con una dosis de refuerzo anual. Para el grupo de riesgo (mayores de 60 años con o sin enfermedad de base, personal de salud y embarazadas, vacunados con COVID-19) se aplicará una dosis con un intervalo de un año desde la última dosis.
Las personas que presenten sintomatología asociada a una infección respiratoria deben usar barbijo por responsabilidad.
“El lavado frecuente de manos o el uso de alcohol en gel debe volverse un hábito, porque nos va a proteger no sólo de las enfermedades respiratorias sino también de las diarreicas agudas; la higiene de manos es una práctica que realmente salva vidas”, enfatizó.